Jesús Molero Sánchez, misionero salesiano de 90 años, y primer misionero español en Corea del Sur, falleció el pasado 18 de octubre tras permanecer casi dos semanas ingresado en el hospital católico de Nam Yang. El salesiano, que primero fue como misionero a Japón en 1951, llegó a Corea en 1956, de donde ya no se movió. Allí impulsó la cultura española a través de la Universidad Nacional de Seúl, poniendo en macha el departamento de Lengua y Literatura Española y en la que estuvo impartiendo clases hasta el año 2013.
Natural del pueblo toledano de La Villa de Don Fadrique, en 2006 fue condecorado con la Cruz Oficial de Isabel la Católica, concedida por Su Majestad el Rey Don Juan Carlos, por su gran trabajo por la educación de los jóvenes. Siempre destacó por su trabajo de animación misionera y animación vocacional. También fue condecorado con la Medalla de Oro de la Cruz Roja de Corea en 2003 y nombrado Ciudadano de Honor de Seúl. Por expreso deseo suyo hace muchos años, su cuerpo será donado para que sirva en los estudios de Medicina de la Universidad Católica de Seúl.