Que a los niños les gusta la música y bailar no es ningún secreto. A los nuestros también. Y si a eso lo acompañamos con algún artilugio que haga ruido…. ya es la bomba.
Pues nuestros chicos han fabricado un instrumento en el taller de música. Han cogido una caja de quesitos… la han pintado y decorado con gometas. Por último, la han llenado de macarrones. Lo agitamos ¡y a bailar! Cada uno lo ha llamado de una forma… para algunos es una pandereta, otros una maraca, un tambor…. Bueno…. han disfrutado mucho con su “caja de música”.