PAUTAS PARA TRABAJAR LA RELAJACIÓN
Ante situaciones de estrés y ansiedad, las actitudes, acciones y actividades que ayudan a canalizar dichas situaciones son:
– Colorear mandalas.
– Moldear plastilina o arcilla.
– Explotar burbujas de plástico.
– Escuchar música relajante durante unos minutos con los ojos cerrados…
– Crear situaciones de comunicación de los propios pensamientos. Por ejemplo:
- Que el niño escriba sus pensamientos y los eche en un baúl. Echar tanto ideas positivas como negativas. Fomentar un momento íntimo para comentarlas con tranquilidad.
- Hacer un termómetro de las emociones.
- Crear un programa de economía de fichas con las acciones que se quieren modificar junto con consecuencias y premios.
- Contratos de normas para cumplir.
– Fomentar la verbalización de autoinstrucciones, ya que siguiendo la idea central del modelo creado por Meinchembaum, permite que a través del lenguaje se favorezca la función de guiar y ordenar su propia conducta externa.
– Visualizar una imagen que al evocarla, reemplace los pensamientos negativos por positivos.
– Anticipar los hechos y planificar el tiempo para saber gestionar lo que ocurre en cada momento.
– Realizar actividades deportivas y al aire libre, tanto dirigidas como no dirigidas.
– Compartir momentos en familia para favorecer la relajación: practicar la respiración, leer un cuento, escuchar música.
Algunos libros que pueden orientarnos son los siguientes:
- Eline Snel (2014). «Tranquilos y atentos como una rana». Editorial Kairos.
- Eline Snel “Respirad. Mindfulness para padres con hijos adolescentes”. Editorial Kairos.
- Susan Kaiser Greenland «El niño atento: Mindfulness para ayudar a tu hijo a ser más feliz, amable y compasivo»en Desclée.
- Deborah Schoeberlein. «Mindfulness para enseñar y aprender. Estrategias prácticas para maestros y educadores”.
- Cuentos infantiles como los libros de monstruo de los colores o el emocionómetro del inspector Drilo.
Por último, debemos reflexionar sobre cómo afrontamos las actividades y acciones del día a día de nuestros hijo/as y/o alumnos /as o qué expectativas transmitimos; organizar y planificar el tiempo de tal forma que aportemos momentos de disfrute y tranquilidad en los más pequeños y buscar y llevar a cabo las más apropiadas de una forma contextualizada y sistemática.
Todo esto nos ayudará a avanzar a nivel emocional de forma satisfactoria y por consiguiente, en los aprendizajes y socialmente, sin olvidar otorgar importancia al esfuerzo diario.
Se puede conseguir y siguiendo la reflexión de Elsa Punset, afirmamos:
¡¡¡¡el mundo está en tus manos!!!!
Inmaculada Jiménez Hidalgo
(Maestra de Audición y Lenguaje
Maestra de Pedagogía Terapéutica)
Departamento de Orientación